Pero él verá en mis ojos sus ardores,
porque siempre, al mirarlo, mis miradas
serán besos de amor abrasadores.
Nieves Xenes.
Déjame que rete amor
entre sombras y viento,
por la tierra... por el mar.
Déjame que rete entre los
mares de oleadas en pasión
por recuerdos de un adiós.
Déjame que rete en vaivenes
de olvido y de sabores a rosas...
En noches apasionadas.
Déjame que rete la manera
de este aventurero amor.