Glaciar
Ana-Magnolia
Ana Magnolia

 

 

 

 

Duelen...

tu espalda helada, tu fría nuca, tus gélidos ojos que ya no me miran nunca.

La rigidez de tus hombros, para mí tu indiferencia absoluta, el glaciar del desamor 

y la muerte que barruntas.

No son casualidad mis escalofríos, ni esta soledad que mientras más grande  

cada día yo, más diminuta.

Se volvió anémica la ilusión y las risas pasaron de ser muchas a ninguna.

Y el desamor, como un ladrón experto se lo va llevando todo, creando fisuras, 

hasta que cae de golpe la verdad y solo hay una...

Que el amor es eterno mientras dura.